CATÁLOGO FOTOGRÁFICO DE FORTIFICACIONES
Hoy inauguramos sección en este
blog: un CATÁLOGO FOTOGRÁFICO DE FORTIFICACIONES.
Esta es una idea a la que venía
dándole vueltas desde hacía ya algún tiempo, pero que siempre iba posponiendo.
El objetivo principal de este
CATÁLOGO FOTOGRÁFICO DE FORTIFICACIONES que hoy se inicia, es ofrecer una
visión general de los fortines de la
Guerra Civil Española que aún podemos encontrar distribuidos por el territorio.
Como podrá comprobarse, el estado de conservación de estas fortificaciones es
muy dispar, contando con construcciones en perfecto estado, frente a otras de
las que apenas queda un pequeño túmulo de piedras asomando en el terreno. No
obstante, todas ellas son importantes, pues proporcionan una valiosísima
información sobre las características que tuvo el frente durante la Guerra
Civil Española.
En el CATÁLOGO FOTOGRÁFICO DEFORTIFICACIONES sólo se incluyen fortines construidos con elementos sólidos
(hormigón, cemento, piedra, ladrillo, etc.), prescindiendo (al menos por el
momento) de incluir otros importantes restos (trincheras, refugios, pistas militares, inscripciones,
huellas de impactos, restos de material bélico, etc.) que, aunque también han sido catalogados, convertirían este inventario en algo demasiado extenso.
Para dar un orden a los
contenidos de este catálogo se ha realizado una división en zonas, respondiendo
éstas a cuestiones geográficas e historiográficas, es decir, que se ha
prescindido de la típica división por términos municipales y se ha apostado por
los elementos topográficos y
orográficos, ya que considero que éstos son más adecuados para ordenar e interpretar correctamente
los restos de la guerra desde una
perspectiva historiográfica. Es por este motivo que, en una misma zona,
podremos encontrar restos de diferentes términos municipales, pero que guardan
entre ellos una unidad histórica, topográfica y cronológica respecto a la organización que tuvo el frente durante la
Guerra Civil Española.
Por su parte, los contenidos del
catálogo serán muy sencillos, limitándose a una única fotografía del resto
catalogado, con un pie de foto en el que se incluye signatura identificativa,
municipio en el que se encuentra, ejército al que perteneció (EPR para Ejército
Popular de la República y EN para Ejército Nacional) y fecha aproximada de su
construcción. Como se comentaba más arriba, no se pretende presentar aquí un profundo
trabajo de catalogación con su correspondiente estudio historiográfico y arqueológico (eso lo
reservo para otro momento), sino solamente proporcionar una visión general de los
restos de los que aún queda alguna huella.
El CATÁLOGO FOTOGRÁFICO DEFORTIFICACIONES contará con página propia en este blog, cuyo enlace estará
situado a partir de hoy, de manera permanentemente, en la barra lateral derecha de la pantalla, para así
poder ser consultado en una ventana a parte.
El material preparado es numeroso,
pero se irá presentando poco a poco. De
momento iniciamos el catálogo con las siguientes zonas:
I) ALTOS DE LA CARRASCOSA (AC):
12 Restos catalogados.
II) ARROYO DE LA RETORNA (AR): 11
Restos catalogados.
III) LA MARAZUELA (LM): 8 Restos catalogados.
IV) ARROYO DE LA PUENTECILLA
(AP): 21 Restos catalogados.
V) LAS CEUDAS (LC): 8 Restos catalogados.
VI) LOS PEÑASCALES (LP): 3 Restos
catalogados.
VII) EL MONTECILLO (EM): 2 Restos catalogados.
VIII) ARROYO DEL LAZAREJO (AL): 2 Restos catalogados.
IX) LA CUMBRE (C): 13 Restos catalogados.
X) CERRO ALTO (CA): 2 Restos catalogados.
XI) CAMARINES (C): 1 Resto catalogado.
XII) CARRETERA DE CASTILLA (CR): 2 Restos catalogados.
XIII) CERRO LOS GAMOS (CG): 2 Restos catalogados.
XIV) ARROYO DE BULARAS (AB): 2 Restos catalogados.
XV) ARROYO PALACIOS (APA): 3 Restos catalogados.
XVI) MONTE DE EL PARDO (MP): 1 Resto catalogado.
XVII) PARQUE DEL OESTE (PO): 3 Restos catalogados.
VII) EL MONTECILLO (EM): 2 Restos catalogados.
VIII) ARROYO DEL LAZAREJO (AL): 2 Restos catalogados.
IX) LA CUMBRE (C): 13 Restos catalogados.
X) CERRO ALTO (CA): 2 Restos catalogados.
XI) CAMARINES (C): 1 Resto catalogado.
XII) CARRETERA DE CASTILLA (CR): 2 Restos catalogados.
XIII) CERRO LOS GAMOS (CG): 2 Restos catalogados.
XIV) ARROYO DE BULARAS (AB): 2 Restos catalogados.
XV) ARROYO PALACIOS (APA): 3 Restos catalogados.
XVI) MONTE DE EL PARDO (MP): 1 Resto catalogado.
XVII) PARQUE DEL OESTE (PO): 3 Restos catalogados.
Para enlace directo al catálogo PINCHAR AQUÍ.
Estupendo trabajo, muchas gracias por la generosidad de compartir tantas horas de trabajo de campo, y tantas también de cotejo y estudio de la documentación. Sólo tengo una pregunta ¿Ejército Nacional?
ResponderEliminarEnhorabuena, excelente iniciativa
Saludos (Inés)
Hola Inés. Muchas gracias por tu comentario.
EliminarRespuesta a tu pregunta:
Eterno debate cargado de sensibilidades y subjetividades.Con todas las dudas planteadas sobre esta cuestion y sabiendo que la polémica esta servida, en este catálogo he utilizado la denominación con la que se autodenominaban así mismo cada uno de los ejércitos (así aparece en la documentación de época).Los dos eran ejércitos españoles,pero cada uno decidió llamarse de diferentes maneras:Popular los unos,Nacional los otros.
Yo he utilizado sus nombres propios,por eso están en mayúsculas.
?Cómo los definirias tu en este caso concreto?
El debate está servido.
Un saludo
Gracias por contestar, creo que la denominación "ejército nacional" es propia de otros tiempos (por cierto, también se autodenominaron "ejército español" ¿?); 76 años después la historiografía contemporánea utiliza ejército franquista (salvo excepciones normalmente fuera del ámbito acádemico): Viñas, Moradiellos, Preston, Bennassar, Cardona, Casanova, Tusell, Montoliú,... etc. también se utiliza sublevado, rebelde, etc.: entiendo que hay un consenso en utilizar este nombre, independientemente de cómo se autodenominaran (también denominaron la GCE como cruzada). Poniéndome en un extremo, la documentación original también denomina "solución final" lo que hoy en día se conoce como holocausto.
ResponderEliminarEs un buen debate, sí, mi opinión es que es más adecuado ejército franquista (EF), pero es sólo mi opinión.
Saludos y muchas gracias por el trabajo
Yo creo que en este debate se entremezclan muchas cosas que hay que intentar ir separando y analizando por separado:
ResponderEliminarEn julio de 1936 el Ejército Español quedó escindido en dos partes (no era la primera vez que esto ocurría en la historia de España). A partir de ese momento, cada una de esas dos partes experimentó su propio proceso de organización y desarrollo. Ese proceso dio lugar a la aparición de dos ejércitos (españoles los dos) que se enfrentaron en una guerra civil. Esos dos ejércitos, como sucede con todos los ejércitos del mundo, tenían muchas cosas en común, pero también otras muchas cosas que los diferenciaban. Más allá de las diferencias orgánicas, operativas y técnicas, cada uno de ellos adoptó una serie de elementos con los que diferenciarse y definirse: bandera, himno, uniformes, insignias, saludo… y, por supuesto, nombre propio.
Ambos ejércitos eran españoles, eso nadie lo pone en duda, pero cada uno optó por un nombre propio, y recalco lo de NOMBRE PROPIO frente a adjetivo calificativo que, para mí, es en donde reside el problema. Unos decidieron bautizar a su nuevo ejército como Ejército Popular de la República, mientras que los otros lo hicieron como Ejército Nacional. Esta realidad no puede obviarse y creo que, en general, se reflexiona muy poco sobre este interesante aspecto de la historia militar de la GCE, al menos desde una perspectiva sosegada, desideologizada y objetiva (comprendo que no es fácil).
Otra cosa es el empleo (muy generalizado, por cierto) del calificativo "nacionales" para referirse a uno de los bandos, el cual considero muy polémico y que creo que debería de evitarse, aunque, en ocasiones, por inercia, yo mismo lo haya empleado.
Lo primero que hay que tener claro es que tanto el nombre de "Ejército Popular de la República", como el de "Ejército Nacional", no hacían referencia al conjunto de las Fuerzas Armadas de cada uno de los bandos enfrentados en la GCE, sino solo a sus respectivos Ejércitos de Tierra, es decir, que era (y yo creo que sigue siéndolo) el nombre propio de las fuerzas terrestres (la Armada y la Aviación darían para otro debate). Después, podemos volcar sobre estos nombres todas las opiniones, análisis y subjetividades que queramos, empleando los calificativos que cada cual considere más apropiados: rebeldes o leales, sublevados o gubernamentales, facciosos o demócratas, franquistas o republicanos, buenos o malos, nacionales, patriotas, revolucionarios, antifascistas.…
Es curioso que esta polémica no suele surgir al hablar de Ejército Popular de la República, o de Ejército Republicano, cuando en realidad son nombres polémicos también.
Un saludo
Es absurdo ahora querer reescribir la historia con intenciones partidistas. El bando republicano ensalzaba el internacionalismo proletario y el bando nacional el nacionalismo. Bando nacional y bando republicano era como se llamaban a si mismos y como se les llamaba en los medios de comunicación contémporáneos y con posterioridad excepto que los propios bandos usaban adjetivos peyorativos para referirse al bando contrario. Por lo tanto "bando nacional" es el término universalmente aceptado, perfectamente correcto y no implica juicio de valor alguno. A los que quieren cambiar la terminología de esa parte de nuestra historia es porque quieren ahora usarlo con fines partidistas pero se les ve mucho el plumero. Esto es historia y debe quedar como historia a estudiar, no para usar con fines partidistas.
ResponderEliminarSi vamos a ponernos pedantes sugiero que le quitemos el "Gran" a la Gran Bretaña ya que no es tan grande. O podemos hablar de la República Popular de Korea, que, ni es República, ni es Popular ni comprende la totalidad de Korea.
Alfonso - Madrid